Presentación

Articulo para http://www.construir-reforma-casa.com/

A mediados de los ochentas se fraguó una frase que ha pervivido:

Lo que no sale en la Televisión, no existe.

Actualizando la frase, se podría decir hoy que lo que no está en Internet, tampoco existe. Quizá en el Internet de principios de siglo esta frase fuese más rigurosa. Con “Internet 2.0” asistimos a la aparición de “entes” que viviendo en Internet, son irreales, falsos o directamente mendaces. Un experto en Comunicación decía que navegar por Internet es una gran perdida de tiempo por la cantidad de estupideces que cualquier idiota puede colgar allí con un mínimo esfuerzo. Una búsqueda sobre esto:

"surfing the internet is a waste of time"
(navergar por Internet es una perdida de tiempo)
Aproximadamente 291,000 resultados (0.34 segundos)
(por el buscador Google)

Felizmente, en Internet 2.0 se han colgado algunas cosas más. Muchas empresas y Organismos Públicos han abierto gratuitamente sus bases de datos al acceso público. La puesta en marcha de diversos protocolos de intercambio y entrega de datos hace que el flujo entre nuestros PCs y los servidores más sofisticados, sea rápido, seguro y generalmente a satisfacción. De todos estos servicios, quizá los más llamativos sean los “servidores de mapas”.

El “campeón” es sin duda Google Earth. Espectacular y rapidísimo, nos pone el mundo entero (no solo la Tierra) en pantalla a golpe de ratón. Si nos fijamos únicamente en las fotografías aéreas, podríamos infravalorar sus capacidades. Porque realmente lo que ofrece no es solo una serie de fotos más o menos llamativas y perfectamente ordenadas. Si activamos la opción “Relieve” descubriremos que las fotos se elevan adaptándose al relieve topográfico de la zona “visitada”. Si introducimos una dirección postal en la casilla “volar a:” o unas coordenadas geográficas, nos daremos cuenta de la cantidad ingente de datos que Google Earth esta manejando para que funcione este maravilloso Atlas Digital.

Desde hace unos años, todo ese caudal de datos está a la disposición del público general. No solo a través de los programas propios de cada empresa, sino desde cualquiera que se ajuste a unas normas mínimas: las APIs. Unas especificaciones técnicas (diferentes para cada empresa / servidor) que hacen el intercambio de datos sencillo, rápido, casi a ”tiempo real”. Y los requisitos par acceder son bien pocos: un registro de la APLICACIÓN que va a usar la API y dar una dirección de correo-electronico personal. A partir de ahí, los programas pueden usar las APIs para descargar información de muchos tipos: vectoriales y BITMAP, altimetritas, mapas, callejeros, fotos aéreas, de satélite, MDTs (Modelos Digitales del Terreno), etc., etc.

Varios programas han salido al mercado con la idea de convertirse en los “navegadores” por esta vastísima “zona” de Internet. Para usarlos solo hace falta localizar la especificación de la API, introducirlas en el programa y este se encarga de buscar el protocolo de intercambio, aprender las reglas de envio-espera-recepccion y ofrecernos lo que el servidor contiene. Realmente magnifico. ¿Cual es el problema? Los datos nos llegan en unos formatos muy técnicos. Por ejemplo, una foto u ortofoto (foto cenital) es un fichero generalmente tipo JPG, como los que hace nuestra cámara digital. Pero una ortofoto no vale para casi nada si no está GEO-REFERENCIADA. Es decir, acompañada de alguna información que la localice sobre la superficie terrestre, la oriente y nos diga cuanto area representa. Y aquí la cosa se complica. Debe haber tantos formatos de datos para hacer esto, como empresas se dedican a ello. Los datos vectoriales provocan los mismos quebraderos de cabeza o más. Hay que salvarlos en un formato, traducirlo a otro para que nuestro programa de dibujo los entienda. Las continuas mejoras producen choques de versiones, irresolubles muchas veces, entidades que no se interpretan bien, conversiones fallidas o directamente erróneas, etc..

Salvar esas dificultades es lo que he intentado con mi programa:
- Poner en comunicación Autocad con los servidores de datos más interesantes, de manera transparente para el usuario.
- Seleccionar la información que ofrecen.
- Bajarla a nuestro PC y…
- Convertirla en entidades de Autocad accesibles, del tipo de las que usamos habitualmente.

Así, podemos obtener fotos y mapas de Google Earth, Bing, YAHOO MAPS e IGN (Plan Nacional Ortofoto Aerea) y SIGPAC (Servicio Información Geográfica de Parcelas Agrícolas). También podemos bajarnos las altimetrías de los servidores que las ofrecen. Y algún tipo de dato más. Y todo directamente pasa al dibujo actual de Autocad, listo para trabajar y en coordenadas UTM.

Las limitaciones son pocas. Las legales sobre cada servidor, mejor verlas en las propias Webs. Pero el volumen de datos a importar está obviamente limitado. Por ejemplo: cada usuario puede bajar en 24 horas, “solo” 25.000 altimetrías de Google Maps. Algunos servidores de imágenes has sido literalmente “saqueados”, Han instalado filtros para evitar abusos y ocasionalmente dejan de servir imágenes durante unas horas. El servicio suele restablecerse sin mayores problemas.

En ese orden de cosas se trabaja con los datos topográficos de Internet 2.0.

Un saludo de Julen Martínez.